Hace unos años, la sabiduría popular en Occidente decía que tal vez China
podría superar a Estados Unidos (una subsección de Occidente) en 50 años.
Ahora, cualquier pensador serio entiende que China es el perro de arriba y el
Oeste se encuentra en una profunda crisis. Las naciones occidentales han
perdido su liderazgo moral, financiero y político del mundo.
Esta semana vamos a ver por qué los líderes del mundo occidental casi
destruyen su propia civilización. Después trataremos de averiguar qué hacer para
restaurar la vitalidad occidental.
Las causas de la decadencia occidental se han fraguado durante años. Los
resultados se manifiestan en un período muy corto. Nuestros antepasados hubieran
reconocido que la situación tuvo su origen último en la insuficiencia moral por
parte de nuestros líderes.
Éstos son los siete pecados capitales de Occidente:
El orgullo que mata
Los occidentales en su conjunto son percibidos por otros pueblos como
arrogantes, y con razón. Mi propia reacción inicial al vivir en Japón era típica.
Todo lo que hacía Japón que era diferente a como se hacía en Occidente estaba
equivocado. Yo estaba constantemente predicando a mis amigos japoneses (muchos
de ellos pronto pasaron a ser ex-amigos) y diciéndoles qué hacer, hasta que
poco a poco me di cuenta de que yo tenía más que aprender que enseñar.
El liderazgo occidental (especialmente de EE.UU.) ha estado haciendo lo
mismo: diciendo y obligando a los países a adoptar una democracia de dos
partidos y un "consenso a lo Washington (léase Wall Street)" en la
gestión económica. Lo que ellos no saben es que incluso desde la derrota
militar en la época colonial, otros países y culturas han estado diligentemente
estudiando el Oeste para sacar sus propias conclusiones.
El Occidente, por su parte, nunca pensó que tal vez deberían estar
estudiando otras civilizaciones en busca de pistas sobre cómo mejorar ellos
mismos. El resultado es que otros países, especialmente en Asia, han combinado
lo mejor de occidente con lo mejor de su cultura tradicional para crear un
nuevo híbrido vigoroso, dejando que el oeste se ponga al día.
Pereza : la indolencia que mina la fuerza
En algún punto difícil de definir en las últimas décadas el uso de frases
como "ética protestante del trabajo", para describir a los
occidentales que trabajan duro, se ha sustituido con frases como "adictos
a la televisión" (patatas en el sofá).
Los Occidentales de alguna manera pensaban que podían dejar que otros
países hagan todo el trabajo real, mientras ellos permanecían detrás sentados y
daban órdenes. El siguiente chiste resume la situación bastante bien:
"¿Cuántos anglosajones se necesitan para cambiar una bombilla?
Respuesta: "Dos, uno para mezclar los martinis y otro para buscar un
electricista en la guía telefónica."
Esta pereza dio como resultado a lo largo de más de 30-años un déficit del
comercio de mercancías en la mayoría de los países occidentales y finalmente a la
quiebra en la que ahora están.
Avaricia : el amor al dinero antes que a la vida
Tal vez el mayor pecado de los líderes occidentales. Bastante se ha escrito
acerca del pecado de los banqueros codiciosos, por lo que no necesito decir
mucho. Sin embargo, lo que muchos no saben es que el amor al dinero,
literalmente, ha hecho a la mayoría de los americanos esclavos de una
inteligencia artificial. Por muy fantástico que pueda parecer, la mayor parte
de los beneficios generados por Wall Street son generados por inteligencias
artificiales conocidos como programas comerciales que tienen la codicia como su
directriz principal.
Ellos gobiernan Wall Street. Wall Street a su vez es gobernado por un solo
concepto: buscar dinero. La fuente de dinero, la Junta de la Reserva Federal,
funciona como una sola mente no humana gobernada por gigantescas redes informáticas.
La mayoría de los políticos y los altos mandos militares en los EE.UU. reciben
sobornos y aceptan órdenes de Wall Street y de este modo, en efecto, saquean el
planeta en nombre de una inteligencia artificial motivada por la codicia.
Tal vez el mejor ejemplo de un agujero negro de la avaricia que chupa la
vida y vitalidad fuera de los Estados Unidos es la cadena Walmart. Con el fin
de maximizar las "ganancias" o dinero para Walmart, la clase media en
los EE.UU. y su infraestructura industrial han sido diezmados. Los seis
miembros de la familia Walton ahora tienen más dinero que los 100 millones de
pobres estadounidenses.
Hubo una época en que Occidente era visto como el defensor de los derechos
humanos y la moralidad. Ahora Occidente es visto por el resto del mundo como un
conjunto de naciones truhanes y pícaras. El asesinato y el saqueo de millones
de personas en Irak, Afganistán y Libia son sólo las últimas atrocidades
cometidas por el régimen fascista que tomó el poder en Occidente después del 11S
($) en 2001. Las fuerzas militares occidentales ahora matan a no combatientes,
mujeres y niños con el fin de ayudar a los oligarcas fascistas a robar sus
recursos ¿Qué pasó con la caballerosidad?
Gula : Occidente está literalmente
comiendose el mundo
Los Occidentales, la mayoría de los cuales son obesos, han destruido
grandes extensiones de naturaleza virgen para satisfacer el ansia de comida
cada vez mayor. La destrucción de los bosques tropicales para la agroindustria,
así como ranchos ganaderos extensivos y plantaciones de biodiesel son una razón
más de por qué la civilización occidental ha acabado con el 30% de todas las
especies terrestres del planeta en los últimos 100 años. La sobrepesca está haciendo
lo mismo en los océanos.
La codicia por la comida innecesaria está acabando con la variedad de vida
que costó millones de años en evolucionar. Esperemos que los chinos hagan un
mejor trabajo de conservación de la biodiversidad global.
Lujuria : Los temores maltusianos erróneos sobre la
superpoblación han llevado a los gobernantes
occidentales a poner todos sus esfuerzos en separar el sexo de la procreación.
El sexo sin amor como deporte no reproductivo se promueve a través de la
pornografía en todas partes. Se promueve el matrimonio homosexual (que no puede
producir hijos) mientras se todavía está tipificado como delito en el Oeste la
poligamia (que produce gran cantidad de niños).
El resultado es que ahora todos los países occidentales han sucumbido en el
envejecimiento de la población. El Occidente está perdiendo la batalla de la
evolución que, mayormente, se ha ganado en el dormitorio.
Envidia: Los gobernantes de Occidente han estado
tratando de iniciar la 3ª guerra mundial y destruir el 90% de la humanidad , porque no podía soportar la idea de otras culturas y naciones que los superaran.
Fue su envidia de otras civilizaciones lo que dio lugar a su aislamiento
internacional actual.
Por tanto, ¿qué puede hacer Occidente para recuperarse?
Por desgracia, lo primero que Occidente tiene que hacer es lo que los
adictos a la heroína tiene que hacer para romper su adicción: cortar
drásticamente (“go cold turkey”). En este caso, es la adicción al dinero lo que
necesita ser curado. El dinero no tiene sentido a menos que esté respaldado por
cosas que realmente existe en el mundo real. Eso significa que los occidentales
tienen que empezar a hacer cosas de nuevo. Eso significa trabajar de nuevo.
Para volver a lo que dicen las chicas asiáticas en la barra del bar: "No
cariño, no dinero".*
El Occidente también tiene que drenar todo el dinero fraudulento del
sistema político y económico hasta que el dinero tenga un valor real de nuevo.
Los Estados Unidos tienen que dejar de usar la propiedad externa para operar
con el mal llamado dólar de EE.UU. y comenzar a emitir su propia moneda. Los
países del sur de Europa también tienen que abandonar el euro.
Eso significará un tiempo, pasajero y muy breve, en el que las
importaciones de repente serán muy costosas. Ese es el dolor (“that is the pain”).
A continuación, habrá un montón de puestos de trabajo para fabricación
local, a medida que la gente compra productos nacionales, y las exportaciones serán
competitivas de nuevo. También habrá un montón de negocios turísticos, con más
creación de empleo. Esa es la ganancia (“that is the gain”).
Más importante es que los países occidentales tienen que renovar sus
sistemas políticos y económicos. Tienen que empezar a imitar a los chinos y los
lugares como Singapur y crear un híbrido entre la meritocracia y la democracia.
Los chinos fueron pioneros en la meritocracia con los exámenes imperiales,
pero, como mi padre una vez dijo, "lo perdieron, dedicando todo a
memorizar los malditos textos antiguos." Los británicos copiaron el
sistema y lo mejoraron al basar los exámenes de ingreso en los más modernos y
relevantes temas. Los chinos volvieron a readoptar ese sistema y comenzaron a
agregar sus propias mejoras.
El sistema chino nuevo combina meritocracia con la democracia en tiempo
real. Su liderazgo responde a las encuestas de opinión y blogs a diario, porque
saben que de lo contrario darían lugar a una pérdida del Mandato del Cielo.
Este sistema está aún siendo desarrollado y mejorado, pero no puede haber
ninguna duda de que el centro mundial de gravedad económico se ha trasladado a
China y seguirá haciéndolo siempre que su sistema de gobierno siga siendo
superior. Sin embargo, los chinos saben por propia experiencia histórica que
una sola fuente central de poder, por muy competente o benévolo que sea,
conduce finalmente al estancamiento.
El Oeste necesita asegurarse de que no termine todo siendo una sola China
mundial, mediante la creación de sus propios sistemas competidores de meritocracia.
El pentágono es un ejemplo de una meritocracia con éxito en Occidente, que se
puede utilizar como un modelo para un sistema nuevo. El defecto principal, y
fatal, del pentágono fue que era parasitaria y no autosuficiente.
El sistema legal sigue siendo tal vez la parte más sana que queda del mundo
occidental, pero también se ha visto seriamente socavada por la corrupción y la
falta de transparencia y rendición de cuentas.
La democracia era también un sistema muy bueno en el pasado. Funcionó muy
bien en una pequeña ciudad-estado, donde los rumores proveían libertad de
información y las reuniones en la ciudad se podría convocar de forma espontánea
en respuesta a las necesidades. Sin embargo, en casi todo se ha devaluado en el
Occidente moderno por el soborno, el fraude, la censura, el lavado de cerebro y
la incapacidad de responder en tiempo real a la emergente conciencia grupal que
se está desarrollando en Internet.
Es por eso que es necesario establecer desde el principio una futura nueva agencia
de planificación para que pueda incorporar los mejores métodos y modelos de
todo el mundo y del pasado histórico.
Si se hace bien, Occidente puede todavía aprovechar plenamente su superior ciencia
y tecnología para ayudar a crear un mundo ideal en armonía con la naturaleza y
la humanidad entera. ¿Qué estamos esperando?
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